Una caravana de vehículos la llevará primero a la Catedral de Brasilia, para allí tomar el Rolls Royce ´Silver Wraith´ sin capota de la Presidencia brasileña que la llevará hasta el Congreso.
La presidenta electa de Brasil, Dilma Rousseff, partió de la Granja do Torto, residencia campestre del Ejecutivo en las afueras de Brasilia en la que vivió los dos últimos meses, para dirigirse al Congreso Nacional, donde jurará el cargo.
Una caravana de vehículos seguida desde el aire por un helicóptero la llevará primero a la Catedral de Brasilia, situada en el comienzo de la Explanada de los Ministerios, para, si la lluvia lo permite, tomar allí el Rolls Royce "Silver Wraith" sin capota de la Presidencia brasileña que la llevará hasta el Congreso.
En la sede del Legislativo, Rousseff, una economista de 63 años, se dirigirá al plenario de la Cámara de Diputados, donde jurará el cargo, y lo mismo hará el vicepresidente electo, Michel Temer.
A la ceremonia asisten los jefes de Estado de Bolivia, Colombia, Chile, El Salvador, Guatemala, Guinea Bissau, Uruguay, Paraguay, Perú, República de Guinea, Surinam y Venezuela, así como el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, y la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton.
También están presentes el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, los primeros ministros de Portugal, José Sócrates; de Corea del Sur, Kim Hwang-Sik, y de Bulgaria, Boiko Borisov.
Una vez aborde el Rolls Royce, la caravana que la llevará al Congreso será encabezada por motociclistas y por la caballería del Batallón de la Guardia Presidencial y, como homenaje por ser la primera mujer que ocupará la Presidencia brasileña, también será escoltada por integrantes del cuerpo femenino de la Policía Federal.
Unas 20.000 personas eran esperadas en la Explanada de los Ministerios para aclamar a Rousseff y despedir al hasta hoy presidente Luiz Inácio Lula da Silva, pero el público presente es mucho más bajo de lo previsto.
Después de jurar el cargo en el Congreso, donde también pronunciará su primer discurso, Rousseff recibirá honores militares a la salida del legislativo y luego tomará nuevamente el Rolls Royce para dirigirse al Palacio de Planalto, sede del Ejecutivo, donde le espera Lula, quien le entregará la banda presidencial.
Rousseff recibirá enseguida el saludo de las autoridades extranjeras y a continuación despedirá a Lula al pie de la rampa que conduce al palacio.
La presidenta pronunciará un segundo discurso, esta vez desde el "parlatorio" una especie de púlpito en la parte exterior del Palacio de Planalto, luego firmará los nombramientos de sus ministros y terminará los actos oficiales de investidura con un cóctel para invitados especiales en el Palacio Itamaraty, sede de la cancillería. EFE