El atacante lanzó una patada contra un joven y ocasionó que cayera a las vías de un metro, segundos antes que pasara un vagón. La víctima sobrevivió gracias a sus buenos reflejos.
Un hombre empujó a otro hacia las vías de un metro, segundos antes que un vagón pasara por la estación, donde esperaban más pasajeros. El hecho ocurrió el viernes en el andén de Argüelles, de la ciudad de Madrid (España) y causó el pánico entre los presentes.
La víctima sobrevivió gracias a sus buenos reflejos. Al caer, el joven giró sobre sí mismo hacia un lado y terminó refugiándose en un área por donde el tren no circuló. De esta forma, el vagón pasó a su lado sin causarle daños.
Tras el ataque, los pasajeros en la estación retuvieron al agresor hasta la llegada de los vigilantes de seguridad del Metro de Madrid. El atacante, de nacionalidad brasileña y de 27 años, se resistió a la detención con violencia e intentó huir. Llevaba puestos unos guantes de artes marciales.
Por su parte, la víctima, un español de 23 años, tuvo que ser atendido por los servicios de emergencia. El joven solo sufrió algunos golpes y heridas en codo y brazos por la caída. Los dos protagonistas del hecho no tienen ninguna relación ni se conocían.
Cámaras de seguridad
La Policía Nacional española indicó al medio ABC que el detenido relató en su defensa que estaba esperando un vagón en el andén cuando sintió un golpe por detrás, en la espalda; "fue en ese momento cuando empujó a otro varón a las vías".
Sin embargo, las cámaras de seguridad de la estación de Argüelles registraron cómo de pronto y sin motivo aparente el ciudadano brasileño pega una patada contra el joven español y causa que este último caiga a las rieles del metro.
El arrestado ya cuenta con antecedentes de detención en tres ocasiones, dos de las veces por lesiones y la otra por atentado contra la autoridad. Ahora se encuentra acusado del delito de homicidio en grado de tentativa.
Fuentes policiales señalaron al medio El País que sospechan que el agredor padezca algún trastorno psicológico o psiquiátrico, ya que, no se comprende los ataques por sorpresa y sin provocación contra personas a las que no conoce.
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