El ejército israelí afirma que dicho centro médico era como un cuartel general del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Las Fuerzas Armadas de Israel informaron este domingo, mediante un comunicado, que en la toma del Hospital Kamal Aduan, en el norte de la Franja de Gaza, murieron 20 "terroristas" y fueron detenidos otros 240.
El hospital, considerado por Israel como un cuartel general del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), ha sido totalmente desalojado de pacientes como personal y ha sido parcialmente incendiado, según informaron las autoridades israelíes.
"Una veintena de terroristas fueron eliminados durante la operación y se neutralizaron potentes artefactos explosivos colocados por los terroristas", se lee en el pronunciamiento.
La "operación antiterrorista focalizada" ha sido realizada por la 401ª Brigada de Combate, bajo mando de la 162ª División y la Unidad 504 tras un mes de combates en los alrededores.
"Este es una de las detenciones en grupo más grandes llevadas a cabo en un solo punto desde el inicio de la guerra. Durante las detenciones, varios terroristas intentaron hacerse pasar por pacientes, incluso escondiéndose en ambulancias, pero fueron identificados por los efectivos y detenidos", ha relatado el Ejército.
Conflicto en Gaza
Según Israel, entre los detenidos hay 15 milicianos que participaron en el ataque contra territorio israelí del 7 de octubre, cuando murieron unas 1 200 personas. Este ataque fue el detonante de la actual ofensiva militar israelí que ha costado la vida a más de 45 500 palestinos solo en la Franja de Gaza.
Israel ha confirmado también el arresto del director del hospital, identificado por fuentes palestinas, como el doctor Hosam Abu Safiya.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) denuncia que el asalto al Kamal Aduan se ha producido en medio de "restricciones de acceso para sus colaboradores" y que las hostilidades "están echando por tierra todos nuestros esfuerzos y apoyo para mantener el funcionamiento mínimo del centro" en lo que ha interpretado como "un desmantelamiento sistemático del sistema sanitario en Gaza que representa una sentencia de muerte para decenas de miles de palestinos".
Además, ha confirmado que el centro ha quedado inactivo, con lo que se priva al norte de la Franja de Gaza de su hospital más importante, dejando sin atención a los 75 000 palestinos que aún permanecen en la zona.
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