El actual jefe de Estado, de 85 años y en el poder desde 1982, tiene como principal rival el abogado internacional y ex viceministro de Justicia Maurice Kamto, de 64 años.
Camerún celebra este sábado el último día de la campaña para las elecciones presidenciales que se celebrarán este domingo, con el actual jefe de Estado, Paul Biya -de 85 años y en el poder desde 1982-, en busca de su séptimo mandato.
Los tres principales candidatos a contestar la permanencia del segundo presidente más longevo de África tienen hoy sus últimos mítines repartidos entre la capital del país, Yaundé, y la localidad de Duala (núcleo económico).
Biya, por su parte, se encuentra en Maroua, capital de la Región del Extremo Norte de Camerún, y no ha hecho ninguna salida desde el inicio de la campaña, el pasado 22 de septiembre.
Frente a Biya, compite como principal rival el abogado internacional y ex viceministro de Justicia Maurice Kamto, de 64 años.
Aunque nunca antes se había presentado a elecciones, ha logrado atraer a miles de seguidores y, además, acaba de recibir el apoyo otro de los candidatos, Akéré Muna. Este ha anunciado su retirada de la carrera para formar una coalición de último minuto.
Entre los opositores también destacan Joshua Osih, candidato del Frente Democrático Social de Camerún (FDS, el principal partido opositor del país), y Cabral Libi, un político de 39 años al que ya denominan "el Macron camerunés", en referencia al mandatario francés, y que se ha ganado la confianza de muchos jóvenes.
Esta campaña ha estado marcada por la convulsa situación en las regiones anglófonas del país, que acumulan el 20 % de la población y reclaman la independencia por considerarse marginados.
Desde octubre de 2017, el conflicto adquirió tintes de rebelión armada y, según cálculos de organizaciones internacionales, al menos 3.000 civiles han muerto ya y otras 200.000 personas han tenido que dejar sus hogares.
Biya mantiene una postura completamente rígida frente a los reclamos secesionistas mientras que los candidatos opositores se han manifestado abiertos a tener un diálogo inclusivo si son elegidos. (EFE)
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