Los oficiales realizaban una operación para irrumpir en un escondite usado por militantes islamistas en el desierto cuando fueron atacados.
Más de 50 miembros de la Policía de Egipto murieron este sábado tras un enfrentamiento contra un grupo de militantes islamistas en la zona del oasis de Bahariya, según confirmó el gobierno en un comunicado oficial.
De acuerdo a información de la BBC, la operación tenía como objetivo irrumpir en un escondite de los islamistas ubicado a 135 kilómetros de El Cairo. Sin embargo, cuando los oficiales llegaron los yihadistas les tendieron una emboscada y abrieron fuego.
Emboscada. Una fuente de seguridad citada por medios locales, afirmó que el convoy de los oficiales fue atacado con granadas y artefactos explosivos. La situación empeoró debido a la familiaridad de los atacantes con el terreno, donde se habrían estado entrenando.
Durante el ataque el comandante oficial no pudo realizar un llamado para pedir refuerzos por aire y tierra, debido a fallas de comunicación en el desierto. El Ministerio del Interior egipcio confirmó en un principio la muerte de 16 policías, pero fuentes de seguridad confirmaron que esta cifra superaría las 50 víctimas.
Reacciones. Tras el ataque varios aliados de Egipto salieron a condenar el ataque, entre ellos Estados Unidos que en un comunicado expresó su rechazo de forma enérgica por el ataque y ofrecieron su total apoyo al Gobierno para continuar la lucha contra los yihadistas.
También se pronunciaron desde el Consejo de Seguridad de la ONU y calificaron la emboscada como un atroz y cobarde ataque terrorista. Además expresaron su profunda solidaridad y condolencias a las familias de las víctimas y al Gobierno de Egipto.
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