El niño permaneció horas encadenado a la tina del baño. Cuando este fue llevado al Hospital, se le encontró extremadamente delgado y con moretones. La policía no descarta que el menor haya sido víctima de maltrato infantil.
La muerte de un niño de 12 años por desnutrición trajo consigo la detención de su padre y su madrastra en las instalaciones de un hotel en Indiana, Estados Unidos. La policía encontró videos y fotos que mostraban al niño amarrado con un collar de perro alrededor de su cuello a la bañera del hotel.
El menor fue identificado como Eduardo Pozo. Su padre Luis Pozo, de 32 años, y su esposa Dayan Media Flores, de 25 años, enfrentan tres cargos cada uno de negligencia y un cargo de confinamiento.
Según recogió People, el alguacil indicó durante una conferencia de prensa que el niño estaba "severamente demacrado” y “con un peso aproximado de 50 a 55 kilos", sin fracturas, pero moretones "por todas partes”. "Hace mucho tiempo que estuvo sin comer", indicó. Los otros tres niños de la pareja - una niña de 9 años, un niño de 5 años y un niño de 2 años – están sanos y fueron colocados en una agencia de protección infantil.
Pozo y Flores se estaban quedando con los cuatro niños en el hotel haciéndose pasar como empleados contratados para en realidad publicar anuncios que promocionaban un circo ambulante.
Las autoridades policiales se enteraron sobre el caso del niño luego de que su padre lo llevara donde los trabajadores del hotel. Ahí se dieron cuenta de los signos de abuso del menor. Eduardo fue declarado muerto a las 3:05 am, solo 13 minutos después de su llegada al hospital, pero ya había dejado de respirar cuando los doctores lo vieron.
Los investigadores obtuvieron una orden de registro y regresaron a la habitación de motel de la familia, donde encontraron cadenas, restricciones en los tobillos y las muñecas, y el collar del perro. Las pruebas de video y fotográficas recuperadas de los teléfonos celulares de los padres y un sistema de seguridad basado en la web en su poder mostraron el supuesto maltrato al niño, pero también que "parecía ser un niño normal y feliz hace aproximadamente un año.
Según comentó el alguacil, "tanto el padre como la madrastra negaron haberle ocultado alimentos al niño", dijo. “El padre sí admitió algún tipo de abuso físico contra el niño, y la madrastra es la que realmente nos dijo que el padre abusa físicamente del niño, y que también usa las restricciones que le imponen”, indicó.
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