Mônica Calazans, una enfermera afroamericana de la Unidad de Cuidados Intesivos del hospital Emilio Ribas, recibió la primera dosis de la vacuna china CoronaVac en Brasil.
Una enfermera de 54 años recibió este domingo la primera vacuna contra el coronavirus en Brasil, inmediatamente después de que el regulador sanitario del país (Anvisa) autorizara el uso de emergencia de dos inmunizantes, constató la AFP.
Mônica Calazans, una enfermera afroamericana de una UCI del hospital Emilio Ribas, recibió la dosis de la vacuna china CoronaVac, en una ceremonia en presencia del gobernador de Sao Paulo, Joao Doria.
En cifras de víctimas mortales, Brasil se sitúa detrás de Estados Unidos, con casi 210 000 muertos. El gigante sudamericano se enfrenta además ahora a una nueva variante, identificada en la región amazónica que, según los expertos, podría ser más contagiosa.
Impulso a la vacunación
En todo el mundo, el coronavirus ha causado más de dos millones de muertos y más de 94,4 millones de contagios, según un recuento el domingo de la AFP a partir de fuentes oficiales.
En Europa, la región del mundo más enlutada por el virus, que ya suma más de 657 000 decesos y supera los 30,4 millones de contagios, varios países pisaron el acelerador en sus campañas de vacunación.
Francia prevé ampliar su dispositivo a partir del lunes, vacunando a mayores de 75 años que no vivan en residencias de ancianos (5 millones) y a casi 800.000 personas con patologías de "alto riesgo".
El país, que ya registró más de 70 000 fallecimientos por COVID-19, impuso un toque de queda nacional a las 18H00.
La vecina España comenzó este domingo a administrar la segunda dosis de la vacuna anticovid a las personas que ya habían recibido la primera a finales de diciembre, destinada a residentes de geriátricos y sus cuidadores.
Pese a que España registró el viernes un récord de 40 197 contagios en 24 horas, en plena escalada de infecciones en la tercera ola, el gobierno descartó el sábado un nuevo confinamiento general.
En Noruega, la Agencia de medicamentos anunció que sospechaba que la primera inyección de la vacuna hubiera causado la muerte de 13 ancianos de salud delicada, y que lo estaba investigando.
No obstante, Steinar Madsen, un responsable de la Agencia noruega de Medicamentos, matizó que los efectos secundarios no eran motivo de "alarma". "Está claro que esas vacunas presentan pocos riesgos, salvo la excepción, mínima, de los pacientes más frágiles", señaló.
Entretanto, otros países decidieron reforzar o extender las restricciones. Austria anunció el domingo prolongar su confinamiento hasta el 8 de febrero, por miedo a la variante de COVID-19 detectada en el Reino Unido.
Por su parte, el gobierno británico dijo que se planteaba la opción de pedir a todos los visitantes que lleguen al Reino Unido aislarse en hoteles, reforzando las nuevas medidas anticoronavirus que entrarán en vigor en las próximas horas.
Y en Portugal, donde el gobierno instauró un segundo confinamiento, miles de electores acudieron este domingo a las urnas para votar anticipadamente en las presidenciales del 24 de enero.
AFP
Comparte esta noticia