El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, activó el proceso en el 2021 para que su país dejara la OEA luego de las críticas del organismo a los comicios en los que fue reelegido.
Nicaragua, oficialmente, ya no forma parte de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Esto luego de que el organismo internacional había aprobado desde hace dos semanas una resolución en la que reconocían que la salida de dicho país se consumaría este domingo 19 de noviembre.
El Ejecutivo sandinista presentó el 19 de noviembre de 2021 la solicitud formal para salir luego de que la Asamblea General de la OEA descalificara las elecciones presidenciales del 7 de noviembre de ese mismo año. Daniel Ortega, en el poder desde 2007, fue reelegido en ese proceso para un quinto mandato y cuarto consecutivo, con sus principales contendientes en prisión.
La OEA resolvió por mayoría que las elecciones que garantizaron la permanencia de Ortega en el poder, junto a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, “no fueron libres, justas ni transparentes” y no tenían “legitimidad democrática”.
Es la primera vez que un país abandona de manera formal la OEA, pese a que Nicaragua fue uno de sus miembros fundadores. Cuba fue expulsada en 1962, mientras que la pertenencia de Venezuela sigue en disputa dado que Nicolás Maduro inició en 2017 el proceso para salir del organismo, pero este dejó de reconocer a su Gobierno.
El régimen de Ortega acusó a la organización de vulnerar su propia Carta fundacional en referencia a la no injerencia en los asuntos internos de los países y de estar controlado por Estados Unidos.
Llamado a respetar los derechos humanos
La OEA también precisó en su resolución que la salida de Nicaragua “no deja sin efecto las demás obligaciones legales” del país centroamericano en materia de derechos humanos.
“Nicaragua sigue obligada a respetar todos los derechos humanos reflejados en las normas consuetudinarias; todos los derechos humanos contenidos en las convenciones multilaterales de derechos humanos de las que Nicaragua es parte”, destacó la OEA.
Estados Unidos reiteró este domingo este mensaje e incluso abrió la puerta a imponer nuevas sanciones contra el Gobierno de Ortega y su entorno.
El principal encargado del Departamento de Estado para Latinoamérica, Brian Nichols, dijo que la salida de Nicaragua de la OEA no impedirá que Washington “tome medidas para proteger los derechos humanos y la democracia del pueblo nicaragüense”.
Paralelamente, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, tildó la salida de Nicaragua de la OEA como “desesperación” para evadir la justicia y subrayó que Estados Unidos y sus aliados revisarán “todas las herramientas disponibles” para que Ortega y Murillo rindan cuentas.
La Administración de Joe Biden ha impuesto varias sanciones económicas y restricciones de visados para funcionarios nicaragüense por la persecución de opositores políticos, activistas y miembros de la Iglesia católica.
En febrero pasado, Estados Unidos recibió a 222 presos políticos nicaragüenses desterrados por el Gobierno de Ortega.
(Con información de agencia EFE)
Te recomendamos
Comparte esta noticia