Las autoridades pidieron extremar precauciones a la población, pese a que el huracán se ha degradado a baja presión remanente.
El huracán Willa, de categoría 3 en la escala Saffir-Simpson y hoy degradado a baja presión remanente, no dejó víctimas, pero sí inundaciones, desbordó ríos y provocó daños generales limitados a su paso por el noroeste de México.
El fenómeno tocó tierra el martes por la noche en la población costera de Escuinapa, estado de Sinaloa, y hoy se localiza en tierra en el sureste del estado de Coahuila con desplazamiento rápido hacia el noreste, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Willa derribó árboles y postes de energía eléctrica con la posterior suspensión del servicio, desbordó ríos y arroyos que inundaron e incomunicaron varias poblaciones en los estados de Sinaloa, Nayarit y Jalisco.
Los municipios de Escuinapa y El Rosario, en Sinaloa, y las zonas aledañas fueron los más afectados, aseguró el gobernador del estado Quirino Ordaz, quien este miércoles recorrió la región.
"Afortunadamente no se registraron pérdidas de vidas humanas, y esto fue posible gracias a que se evacuaron más de 4.000 en los diferentes albergues, familias enteras que habitan en zonas de riesgo", dijo el mandatario estatal en Escuinapa.
El director general de Protección Civil, Ricardo de la Cruz, acompañó al gobernador para hacer una evaluación de daños con el objetivo de activar los trabajos de reparación y la entrega de ayuda para enfrentar los efectos del fenómeno.
"Estamos evaluando los daños, además de supervisar el operativo de auxilio a la población, el cual es apoyado por el Ejército Mexicano, con su Plan DN-III-E, y por la Marina Armada de México, con su Plan Marina", expresó De la Cruz.
El SMN reportó lluvias de más de 182 milímetros, lo que provocó el desbordamiento de los ríos Baluarte, en Sinaloa, y Cañas, que sirve de límite con Nayarit, donde también se desbordó el río Acaponeta. (EFE)
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