El narcotraficante mexicano, excapo del Cartel de Guadalajara cuya historia ha sido adaptada por la serie ‘Narcos: México’, se encuentra prófugo a pesar que Estados Unidos lo busca por el asesinato de un agente de la DEA.
El narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero evitó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México se pronuncie sobre su extradición a EE.UU., donde lo buscan por el asesinato del agente de la DEA Enrique ‘Kiki’ Camarena Salazar en 1985. Caro Quintero, quien salió de prisión en México en 2013 por un fallo judicial que luego fue revocado y actualmente se encuentra prófugo, presentó una solicitud para que el ministro Luis María Aguilar Morales se declare impedido para conocer su demanda de garantías, señaló el diario mexicano Milenio.
Aguilar Morales hizo público el proyecto de sentencia donde proponía negarle al narcotraficante la protección de la justicia sobre su extradición a Estados Unidos, que en abril de 2018 le abrió un nuevo proceso criminal como responsable del secuestro, tortura y asesinato del agente de la Dirección Estadounidense Antidrogas (DEA).
El recurso que el capo mexicano interpuso este 26 de marzo fue admitido a trámite y turnado al ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo. Este ya es el segundo que presenta luego de que en noviembre de 2016 reclamó que el ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea se encargara de elaborar el proyecto, destacó el diario mexicano.
"Narco de narcos"
Apodado el "narco de narcos", Caro Quintero fue uno de los fundadores del extinto cártel de Guadalajara y llegó a ser uno de los narcotraficantes mexicanos más peligrosos en la década de 1980. Tras salir de la prisión en 2013, el capo se unió a las filas del cartel de Sinaloa y estuvo implicado en el tráfico de drogas, actividad que motivó a que el Gobierno de Estados Unidos decidiera la apertura de un nuevo proceso en la corte del distrito este de Nueva York, la misma en la que se juzgó a Joaquín "el Chapo" Guzmán.
El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció además un recompensa de 20 millones de dólares, una de las "más altas jamás ofrecidas", por la captura de Caro Quintero, además de ordenar que se distribuyan carteles con fotos del acusado y la descripción de algunos de sus rasgos, como cabello "canoso", ojos de "color café", raza blanca e hispana, 1,8 metros de alto y entre 72 y 77 kilos de peso. EFE
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