Vladímir Putin, anunció que Rusia intensificará sus bombardeos en Siria contra el Estado Islámico tras conocerse que el siniestro se debió a un atentado terrorista.
Rusia reconoció este lunes que el avión ruso que se estrelló en Egipto con 224 personas a bordo explotó debido a una bomba colocada por terroristas.
"En el vuelo explotó un artefacto explosivo de una potencia de 1,5 k de trilita. Como resultado, el avión se desintegró en el aire", informó el jefe del Servicio Federal de Información (FSB, antiguo KGB), Alexánder Bortnikov.
El presidente Vladímir Putin, anunció que su país intensificará sus bombardeos en Siria contra el Estado Islámico tras conocerse que el siniestro se debió a un atentado terrorista.
"El trabajo de nuestra aviación de guerra en Siria no solo debe continuar. Debe intensificarse de tal modo que los criminales entiendan que la venganza es ineludible", dijo Putin, en una reunión dedicada a informar sobre los resultados de la investigación del siniestro.
El jefe del Kremlin aseguró que Rusia encontrará y castigará a los culpables del atentado, ocurrido el pasado 31 de octubre sobre el Sinaí egipcio.
"El asesinato de nuestra gente en el Sinaí es uno de los crímenes más sangrientos por número de víctimas. Y no vamos a quitarnos las lágrimas de nuestras almas y corazones. Esto quedará para siempre con nosotros. Pero ello no impedirá encontrar y castigar a los culpables", advirtió Putin.
En un comunicado aparte, el FSB anunció que ofrece 50 millones de dólares de recompensa a quien pueda ofrecer información sobre los autores del atentado.
El avión de la compañía MetroJet se estrelló 23 minutos después de despegar de la localidad turística de Sharm el Sheij con destino a San Petersburgo, lo que causó la muerte de todos sus ocupantes.
Desde el principio, los servicio de seguridad del Reino Unido y EEUU sospecharon que se trató de un atentado, pero Rusia no lo reconoció hasta hoy, aunque suspendió todos los vuelos a Egipto pocos días después de la catástrofe. EFE
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