Aldo Valle se hace cortes en el cuerpo para evitar desalojo

De nuevo el nombre de Aldo Valle sale a la luz pública, quien ahora en libertad tras pasar tres años en prisión acusado de abusar sexualmente de la actriz Leslie Stewart, protagonizó un escándalo desde la ventana del cuarto que habita en un edificio en Surco. 

Vociferando y mostrando la sangre que escurría de los diversos cortes en el pecho y abdomen, denunció ante la prensa y efectivos policiales, que su madre había montado una farsa con el fin de desalojarlo de su vivienda, ubicada en la cuadra uno de la calle Loma Ponsiona del referido distrito.

Más temprano, producto de una pelea familiar donde, según versión de la madre de Valle, éste tomó un cuchillo y se hizo cortes en el cuerpo, versión que él niega ya que sostiene que las laceraciones se la ocasionó con los restos de una botella, luego se enfrentó a sus hermanos, uno de ellos inválido. Entonces, la Policía intervino y lo llevó a la comisaría pero tras algunas horas fue liberado.

En diálogo con RPP, Aldo Valle negó que actualmente consuma drogas, al contario, dijo que está sometido a un tratamiento, además acude a la iglesia. Señaló que ha tenido un comportamiento sano y no tienen derecho a sacarlo del departamento que ocupa en un edificio, contiguo a la vivienda de su madre.

Sin embargo, Alda López Merino, madre de Valle, sostuvo que su hijo miente porque desde hace cuatro días atrás viene consumiendo todo tipo de drogas y alcohol.

Advirtió que su vida y las de sus demás hijos corren peligro, por el comportamiento agresivo de Valle, quien cumple libertad condicional. Pidió la intervención de la Fiscalía de Familia para que internen a Aldo Valle y le brinden apoyo psicológico.

En declaraciones a una televisora local, el protagonista de esta historia contó que fue por el cumpleaños de su progenitora que acudió a la casa de ésta e invitó a un misionero americano, amigo suyo, para presentarle a su madre.

"Tengo un hermano enfermito al que le dije que se calle porque hablábamos de la Iglesia y ella me dijo: lárgate", expresó al señalar que eso inició el enfrentamiento.

Por su parte Alda López indicó que la situación era "vergonzosa y dolorosa" pero pidió ayuda psiquiátrica para su hijo, a quien dijo internó antes en el hospital de salud mental Hermilio Valdizán, pero escapó.

"Él quiere quemar la casa, nos ha tenido secuestrados por la noche y ha amenazado de muerte a mí y a mis hijos menores", agregó.

"Consume drogas, marihuana, crack, mezcla somníferos con alcohol, lo aprendió en Lurigancho (penal donde estuvo recluido)", aseveró.