Una de las peculiaridades del multitudinario acto de fe es el encuentro de la Virgen María con Cristo (hijo), en la esquina de calle Méloc.
Con profunda fe, los vecinos del barrio tradicional de Santa Ana, en Cusco, esperan participar mañana, a partir de las siete de la noche, de la tradicional procesión del Santo Sepulcro y la Virgen Dolorosa.
La actividad es organizada por la Arquidiocesis y la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo.
Este multitudinario acto de fe se realiza con algunas peculiaridades, la más resaltante, es el emotivo encuentro de la imagen de la virgen Dolorosa (madre) y el señor Santo Sepulcro (hijo), en las esquinas de la calle Meloc con Siete Cuartones, donde se da la bendición, en medio de cánticos y oraciones.
Otra característica de la procesión en este antiguo barrio del Cusco, la última que se realiza en Viernes Santo, en la ciudad del Cusco, es que las mujeres cargan el ataud con la imagen yaciente de Cristo en el tramo más pesado del recorrido, desde la Calle Meloc, toda la cuesta de Santa Ana, hasta llegar a la plazoleta, pasada la media noche, para luego trasladarse a su templo, en esye sector.
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