Amprimo, abogado del Arzobispado, negó que Cipriani vaya a ´prohibir el uso de minifaldas o intervenir en la currícula´, pero sí debe participar de la administración.
Natale Amprimo, abogado del Arzobispado de Lima, sostuvo que la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) debe rendir cuentas a la junta administradora "le guste o le disguste", como dicta el testamento de José de la Riva Agüero y el reciente fallo del Tribunal Constitucional (TC).
En diálogo con RPP, indicó que esta junta administradora debe estar integrada por el Rector y un representante del Arzobispado de Lima.
Negó que el Arzobispado y el cardenal Juan Luis Cipriani vayan a "prohibir el uso de minifaldas o intervenir en la currícula", pero sí debe participar de la administración de esta casa de estudios.
"Es una interpretación interesada de la Universidad querer generar una suerte de Apocalipsis diciendo que "acá va a llegar el cardenal Cipriani, va a prohibir la minifaldas e intervenir en la currícula", eso una invención para pretender mover al alumnado y no acatar un fallo que señala, como lo dispuso Riva Agüero, los bienes heredados tienen que ser administrados por una junta de administración, y la Universidad tiene que rendir cuentas le guste o le disguste", afirmó.
En ese sentido, el representante legal del Arzobispado pidió a la PUCP acatar el reciente fallo del TC que le da la razón al Arzobispado sobre el control de la administración de los bienes que dejó en herencia Riva Agüero.
Sostuvo que es inviable que la PUCP pretenda recurrir a tribunales internacionales cuando sabe que en este tipo de casos, en el cual están comprendidas personas jurídicas, no es de su competencia.
En diálogo con RPP, indicó que esta junta administradora debe estar integrada por el Rector y un representante del Arzobispado de Lima.
Negó que el Arzobispado y el cardenal Juan Luis Cipriani vayan a "prohibir el uso de minifaldas o intervenir en la currícula", pero sí debe participar de la administración de esta casa de estudios.
"Es una interpretación interesada de la Universidad querer generar una suerte de Apocalipsis diciendo que "acá va a llegar el cardenal Cipriani, va a prohibir la minifaldas e intervenir en la currícula", eso una invención para pretender mover al alumnado y no acatar un fallo que señala, como lo dispuso Riva Agüero, los bienes heredados tienen que ser administrados por una junta de administración, y la Universidad tiene que rendir cuentas le guste o le disguste", afirmó.
En ese sentido, el representante legal del Arzobispado pidió a la PUCP acatar el reciente fallo del TC que le da la razón al Arzobispado sobre el control de la administración de los bienes que dejó en herencia Riva Agüero.
Sostuvo que es inviable que la PUCP pretenda recurrir a tribunales internacionales cuando sabe que en este tipo de casos, en el cual están comprendidas personas jurídicas, no es de su competencia.
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