El hecho se registró cuando el regidor Roberto Rosado intentó sentarse en la silla del burgomaestre para presidir sesión del Concejo Municipal.
Una denuncia policial fue puesta por el primer regidor de la Municipalidad Provincial de Arequipa, Roberto Rosado, quien se libró de sufrir daños mayores cuando intentó sentarse en la silla del alcalde provincial, Alfredo Zegarra, para presidir la sesión de concejo.
El hecho se registró cuando el concejal llamaba la atención a los gerentes y demás funcionarios para que eviten moverse y contestar llamadas de sus celulares mientras duraba la reunión, cayéndose la silla cuando intentó sentarse.
El regidor pidió la presencia policial al resultar sospechoso el daño en el objeto, verificándose durante la revisión que a este le faltaba un perno.
Ante el incidente, el regidor y el alcalde provincial, Alfredo Zegarra, quien estuvo ausente por el compromiso en otras actividades, exigieron las investigaciones respectivas.
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