El fuerte estallido del explosivo se sintió hasta el sector de Chucarapi, ubicado a 20 minutos del distrito de Cocachacra.
Las ondas expansivas de la dinamita que fue arrojada por un grupo de manifestantes en la parte posterior de la comisaría de Cocachacra, en la provincia arequipeña de Islay, alcanzaron hasta los 10 kilómetros de distancia.
De acuerdo a la información dada por nuestro reportero del lugar, la fuerte detonación se sintió hasta el sector de Chucarapi, ubicado a 20 minutos del distrito de Cocachacra.
En tanto, en Mollendo, otro grupo de opositores a la actividad minera, intentaron bloquear la vía de ingreso al distrito; llegando un contingente policial a tiempo para dispersar a la turba.
Tras los actos de violencia, se conoció que pobladores de Cocachacra abandonan la zona para refugiarse en la Ciudad Blanca.
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