Los restos humanos fueron entregados a familiares luego de la identificación y reconocimiento después de 29 años.
El laboratorio del Instituto de Medicina Legal del Ministerio Público de Ayacucho entregó 23 restos óseos de personas que fueron asesinadas por Sendero Luminoso entre los años 1984 y 1988 en las comunidades de Chaca y Chanquil, distrito de San Miguel, provincia de La Mar.
Los restos fueron entregados a familiares luego de la identificación y reconocimiento, tras la exhumación de fosas comunes de la zona después de 29 años.
Durante el acto de entrega, el arzobispo de Ayacucho y presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, monseñor Salvador Piñeiro García Calderón; y el pastor evangélico Enrique Alva, oficiaron un responso ecuménico en memoria de las personas desaparecidas durante los años de la violencia por el dolor y sufrimiento de los familiares.
Los ataúdes fueron trasladados a la Basílica Catedral de Ayacucho, donde se desarrolló la misa para luego ser trasladados a las comunidades campesinas de Chanquil y Chaca.
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