Población defiende la obra y dice que es necesaria pues ninguna autoridad atiende sus reclamos.
Los pobladores de la zona costera de Chimbote (región Áncash), afectados con la erosión que ocasionan los fuertes oleajes, decidieron construir un enrocado provisional con piedras y arena, para proteger sus viviendas. Sin embargo la Fiscalía Especialzada en Delitos de Medio Ambiente paralizó los trabajos.
La fiscal Karla Vega llegó hasta la zona costera a pedido de los representantes de la Marina de Guerra del Perú. Durante la intervención, la representante del Ministerio Público explicó que iba a constatar el material que están usando. Además observó que debían pedir autorización de la Capitanía para realizar estos trabajos.
Por su parte, el secretario general del pueblo joven Floria Alta, Fidel Purisaca, manifestó que esta decisión la tomaron como una medida de emergencia, debido a que ninguna autoridad hace eco de sus pedidos para la construcción de una defensa costera. "Tenemos que tomar esta decisión porque nosotros somos los que sufrimos las consecuencias. Hay 300 personas en riesgo", explicó el dirigente.
La fiscal declaró que además de rocas, han detectado material de desmonte dentro del área de trabajo, por lo que advirtió que sería un peligro utilzarlo en la obra. A pesar de la advertencia, los moradores anunciaron que continuarán con la obra.
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