Comerciantes peruanos y bolivianos piden solución al problema, ya que son perjudicados porque sólo los martes y viernes comercializan sus productos en Desaguadero.
Por la huelga indefinida contra las concesiones mineras y petroleras que realizan pobladores aymaras en Desaguadero (Puno), se frustró la realización de la conocida Feria Internacional Perú-Bolivia, por temor de los comerciantes a posibles saqueos.
Aunque no se estimaron las pérdidas que se generan, los vendedores aseguran que son miles de dólares, ya que la feria Internacional sólo se realiza los días martes y viernes de cada semana.
Hoy nuevamente no pudieron realizar las transacciones en la ciudad fronteriza, hasta donde llegan comerciantes de Argentina y Bolivia, por lo que invocaron a las autoridades solucionar el problema, pues trabajan con créditos de entidades financieras a las que deben pagar puntualmente.
"Debido a la protesta no se puede cumplir con los depósitos para pagar nuestros préstamos porque no podemos vender nuestros productos", expresó un preocupado comerciante.
En la zona se cuenta con la presencia de unos diez mil pobladores de los distritos de provincias aymaras que llegaron desde ayer, reiniciando su medida de protesta.
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