El presidente Pedro Castillo ha aprovechado la celebración del Día de los Trabajadores para defender su proyecto de Asamblea Constituyente. Y lo ha hecho formulando una pregunta llena de sofismas y manipulaciones: "¿Cuál es el temor a la consulta popular?".
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El presidente Pedro Castillo ha aprovechado la celebración del Día de los Trabajadores para defender su proyecto de Asamblea Constituyente. Y lo ha hecho formulando una pregunta llena de sofismas y manipulaciones: "¿Cuál es el temor a la consulta popular?". En primer lugar habría que recordarle al señor Castillo que él mismo y su primer ministro sostuvieron hasta hace poco que el tema no estaba en agenda.
Y las razones son claras: 1) El Ejecutivo no dispone de los votos necesarios para que se vote una ley autorizando el referendo que necesariamente debe ser aprobado en el Congreso. 2) El país no ha salido de la crisis producida por la pandemia y más bien cada día se acumulan las razones para creer que los resultados del año en curso pueden ser peores que las previsiones. Es evidente que la sola posibilidad de que el Perú entre a un período de polarización agravada es una señal negativa para los inversionistas, por mucho que Castillo reitere que el Perú “es un destino seguro para las inversiones. 3) Sin partidos sólidos y con una alta tasa de rechazo a las instituciones, una Asamblea Constituyente es un camino seguro hacia un conflicto de poderes con el Congreso. Y en consecuencia a más parálisis de la gestión pública 4) Hemos visto a qué condujeron las Asambleas Constituyentes impulsadas por Hugo Chávez en Venezuela y Evo Morales en Bolivia: a la imposición de un modelo que atenta contra la democracia y favorece la permanencia en el poder del déspota de turno.
Nos ha costado mucho restablecer y proteger nuestra imperfecta democracia, precisamente la que permitió el acceso de Pedro Castillo a la presidencia. Resulta por eso inaceptable permanecer en la pasividad cuando el Ejecutivo hacer correr riesgos a nuestras libertades y a los verdaderos intereses de los trabajadores.
Las cosas como son
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