La titular del Midis visitó los hogares de familias usuarias en el distrito de Quiquijana, provincia de Quispicanchi. Los programas sociales beneficiaron a 17 mil familias.
En viaje de trabajo al Cusco, la ministra de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), Silvana Vargas, supervisó los servicios que brinda el sector a través de dos de sus programas sociales, y visitó los hogares de usuarios de Cuna Más y del Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes), que a través del Servicio de Acompañamiento a Familias (SAF) y Haku Wiñay, respectivamente, beneficiaron a más de 17 mil familias en dicha región al cierre del 2020.
La titular del Midis arribó a la comunidad de Huaccaytaqui, distrito de Quiquijana, en la provincia de Quispicanchi, donde verificó la adecuación al contexto no presencial del SAF, servicio que brinda el Programa Nacional Cuna Más, y que ha sido adaptado ante la emergencia sanitaria por la COVID-19.
Esta modalidad de intervención tiene por objetivo mejorar el desarrollo infantil temprano (DIT) de niñas y niños menores de 36 meses de edad que viven en situación de pobreza y pobreza extrema en ámbitos rurales. Al cierre del 2020, en la región Cusco el SAF atendió a 10 126 familias usuarias, mientras que en Quiquijana fueron 361 las familias beneficiarias con consejería telefónica, kits de higiene y protección, así como Kits DIT (compuesto por cuentos y juguetes).
“Yo creo que Cuna Más no es solo ayudar a tener niños más sanos e inteligentes que les guste aprender, es tener familias más saludables y comprometidas. Ustedes están aportando a generar una mejor sociedad y eso es invalorable”, expresó al destacar que el trabajo articulado y con enfoque territorial que realiza este programa social no se ha detenido durante la emergencia sanitaria por la COVID-19.
Posteriormente, la ministra Silvana Vargas constató los resultados de las tecnologías productivas y emprendimientos rurales inclusivos del Proyecto Haku Wiñay, tales como galpones de cuyes, módulos de pastos, cultivo de papa y hortalizas a campo abierto, fitotoldos, cocinas mejoradas, refrigeradoras ecológicas y el mejoramiento de viviendas.
"El componente productivo de generación de oportunidades es fundamental para la protección social. Todo lo que hacemos está bien, pero necesitamos contribuir también a que las familias tengan mejores oportunidades productivas", remarcó.
Haku Wiñay (en la sierra) y Noa Jayatai (en la selva) brinda asistencia técnica, capacitación, transferencia de activos productivos y hace uso de tecnologías, con respeto al enfoque intercultural de las comunidades andinas y nativas. La seguridad alimentaria, generación de ingresos familiares, la inclusión económica y social de las familias usuarias son algunos de los objetivos de este proyecto productivo de Foncodes, programa nacional del Midis.
Al cierre del 2020, Haku Wiñay -mediante proyectos en ejecución- benefició a 7 411 hogares usuarios de la región Cusco, mientras que en Quiquijana se benefició a 500 hogares.
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