El féretro de monseñor Oscar Cantuarias Pastor es velado en la Basílica Catedral, cerca al altar mayor, donde permanecerá todo el día.
Centenares de personas llegan hasta la Basílica Catedral de Piura donde son velados, desde ayer, los restos del arzobispo emérito, monseñor Oscar Cantuarias Pastor, quien dedicara 25 años de su vida a la Arquidiócesis de Piura y Tumbes.
El féretro reposa en el suelo sobre una alfombra de color guinda, el mismo que se encuentra cerca al Altar Mayor de la catedral, hasta donde los fieles llegan para elevar oraciones por Cantuarias Pastor, quien es una persona muy querida entre los católicos.
Algunos de los asistentes, refieren que lo recordarán por la forma tan directa de decir las cosas ante la población y las autoridades, dentro y fuera de sus homilías, con el fin de luchar ante las diversas problemáticas que afectaban a la región.
Hasta el velatorio se han hecho presente algunas autoridades como la alcaldesa de Piura, Ruby Rodríguez, y se espera que en el transcurso del día lleguen otros representantes de diversos organismos e instituciones.
Durante la misa oficiada por el sacerdote, Juan Rebolledo, remarcó que monseñor Cantuarias siempre exhortó que la fe sea madura y responsable y que la doctrina social de la iglesia tenga obras de calidad.
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