Marcelino Rosales Reyne, utilizó su condición de padrino de bautizo para llevar a la menor a trabajar al puesto de jugos que posee en el mercado Jorge Chávez.
Aprovechando la confianza que la familia depositó en él, un hombre de 61 años, se valió de argucias para abusar sexualmente y dejar en estado de gestación a su ahijada de 13 años, en el distrito de San Juan de Lurigancho.
Según informó RPP, Marcelino Rosales Reyne, utilizó su condición de padrino de bautizo para llevar a la menor a trabajar al puesto de jugos que posee en el mercado Jorge Chávez de la Parada, donde la violó sistemáticamente.
Producto del abuso, la menor de edad quedó embarazada y aunque el anciano trató de ocultar su delito ofreciendo regalos y comprando ropa a la víctima, la madre de esta se percató del crecimiento del vientre de la púber a los siete meses de embarazo.
Así, decidió llevarla al hospital de la Solidaridad de la zona, donde confirmaron sus temores. Posteriormente, la joven confesó ante la Policía Nacional y la fiscal de la Familia que su padrino la vejó, por lo cual el anciano fue puesto a disposición del Ministerio Público.
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