Artidoro García Ávila de 78 años se disparó con su propia arma un tiro en la sien, agobiado por una enfermedad terminal.
Un comerciante de 78 años se suicidó de un balazo en la sien, en el interior de su vivienda, ubicada en la calle Huáscar del distrito trujillano de El Porvenir.
Artidoro García Ávila había adquirido un arma para defenderse de los delincuentes, pero agobiado por que le habían detectado cáncer al estómago en fase terminal decidió poner punto final a su sufrimiento.
Su muerte fue instantánea, pues cuando sus familiares fueron alertados por el estruendo, sólo encontraron su cadáver al costado de la cama.
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