Afectados por el incendio, vuelven a montar sus puestos con material precario sin respetar las normas de seguridad.
El gerente de Seguridad Ciudadana y de Defensa Civil de la Municipalidad de Trujillo, César Florez, calificó de “negligentes” a los comerciantes afectados por el incendio en el mercado La Hermelinda.
Esto debido a que los 300 comerciantes que lo perdieron todo, vuelven a construir sus puestos de venta de forma rústica con palos, calaminas y esterilla; en un lugar donde está terminantemente prohibido, debido a que la zona está destinada para la carga y descarga de productos.
Agregó que la causa del siniestro, que dejó más de un millón de soles en pérdidas, no se conocería debido a que controlado el incendio los comerciantes irresponsablemente intentaron recuperar sus pertenencias, sin que los peritos puedan terminar su trabajo.
Finalmente dijo que mientras no tomen conciencia, el mercado La Hermelinda seguirá siendo calificado como “una bomba de tiempo”, por la tugurización e informalidad. A ello se suma las conexiones clandestinas de energía eléctrica que en cualquier momento podrían originar una tragedia.
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