Los restos del personaje que trajo mucha alegría, fiesta y baile fue trasladado hasta Baños del Inca donde se le dio el último adiós junto a sus tres viudas.
El féretro del rey del carnaval, el Ño Carnavalón, partió desde el barrio Lucmacucho donde fue velado la última noche, para luego recorrer las principales calles de Cajamarca despidiéndose hasta el próximo año.
Acompañado de sus viudas, quienes en un mar de lágrimas intentaban cogerse del féretro para evitar que lo lleven, y algunas patrullas y comparsas, el féretro llegó hasta el distrito de Baños del Inca donde fue recibido por más carnavaleros que aún con la resaca de haber gozado por tres días seguidos le daban el último adiós.
Los restos del Ño Carnavalón, llegó hasta su última morada; se dio lectura a su testamente y finalmente los regidores Raúl Aleman, Víctor Chacha acompañado de las reinas de Baños del Inca iniciaron su incineración en medio del llanto de muchos que esperarán un año para nuevamente disfrutar del carnaval.
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