Auristela Acosta asegura que no le entregan el cadáver porque en el DNI de Damacio Cruz solo figuran sus apellidos y al contrario.
Auristela Acosta Villanueva, de 34 años, vive un drama porque aparte de perder a su esposo, hace dos meses, no puede darle cristiana sepultura porque autoridades del Instituto Médico Legal de Cajamarca no le entrega los restos.
Su esposo Damacio Cruz Villanueva, de 55 años, fue hallado muerto en una profunda acequia en Chuquibamba en el valle de Condebamba en Cajabamba, localidad a la que fue a trabajar como agricultor.
Auristela sospecha que lo asaltaron y lo arrojaron en la acequia. Ella vivía con su esposo en el caserío de La Lúcuma, en el distrito de Sanagorán (Sánchez Carrión).
Asegura que no le entregan el cadáver porque en el DNI del fallecido solo figura sus apellidos y al contrario. Incluso, narró que, debido a una confusión, a días de muerto el cuerpo fue entregado por ronderos del valle entregaron a una familia de Chugurbamba, en Sanagorán. Pero ellos se dieron cuenta y lo entregaron a la policia de Cajabamba.
En tanto, el alcalde se Sanagorán, Santos Ruiz Guerra, se comprometió a brindar apoyo para recuperar el cadáver.
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