El pesar por la derrota de Perú era común entre los hinchas, al finalizar el partido; sin embargo, mantienen la fe intacta de llegar a octavos de final.
La esperanza es lo último que se pierde. Con el pesar de la derrota de Perú ante Dinamarca, los trujillanos mantienen su fe intacta en que la selección clasificará a octavos de final en el Mundial de Rusia 2018.
En los centros comerciales donde se reunieron cientos de hinchas, la tristeza era un común denominador. Y más evidente era el sinsabor por el penal perdido de Christian Cueva.
Si bien en los partidos de clasificación, los trujillanos mostraban un semblante optimista, la destreza del equipo rival no los amilana y esperan tener buenos resultados en los próximos partidos.
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