Vecinos de Santa Teresa de Ávila, Mampuesto y Los Naranjos temen enfermedades por gran cantidad de moscas y zancudos.
Moradores de las urbanizaciones Santa Teresa de Ávila, Mampuesto y Los Naranjos, en Trujillo, soportan olores nauseabundos debido al colapso de los desagües, basura acumulada y charcos de agua sucia.
Estos sectores también fueron afectados por el desborde de la quebrada San Ildefonso. El agua con lodo ocasionó el atoro de los desagües y han tenido que vivir en esta situación durante 15 días. Recién hoy personal de Sedalib llegó al lugar para atender esta situación.
En dichas urbanizaciones también se puede observar que hay gran cantidad de moscas y zancudos debido a la presencia de charcos de agua, barro y tierra que aún no ha sido retirada.
En avenidas como Miraflores se sigue acumulando gran cantidad de basura y el polvo que se levanta pone en riesgo la salud de la población.
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