En negocios e instituciones, públicas y privadas, se apreció a trabajadores vistiendo la blanquiroja con entusiasmo.
Trabajadores de empresas de sector público y privado se contagiaron del entusiasmo por el encuentro de la selección con Argentina, y acudieron a sus centros de labores vistiendo la camiseta peruana.
En el centro histórico de Trujillo y negocios cercanos, se puso apreciar a los empleados realizando sus actividades con motivación y fe en el triunfo de Perú. Este clima de positivismo se siente también en las calles donde peatones visten la blanquiroja, haciendo se este día, uno muy particular.
En la avenida españa y centros comerciales también hay gran afluencia de público, que acude a comprar su polo de la selección peruana por 10, 15 y 20 soles. Ambulantes hacen su agosto con la venta de la camiseta, que en mucho tiempo no presentaba la demanda de estos días.
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