Se trata de 140 vendedores del mercado Buenos Aires de Chiclayo que con su propio dinero han implementado estas medidas de bioseguridad para protegerse ellos y sus clientes.
Comerciantes del mercado Buenos Aires, en el centro de Chiclayo, región Lambayeque, colocaron vitrinas de vidrio en sus puestos para prevenir la COVID-19. De esta forma, se mantienen la distancia social entre vendedores y clientes, y se evita el contacto directo.
Son cerca de 140 los puestos de carnes, pollos, pescados, verduras, abarrotes, entre otros, los que adoptaron esta medida. Sin embargo, pese a la preocupación de los comerciantes por cumplir con los protocolos, tienen poca asistencia de público, pues muchas personas prefieren comprar a los ambulantes que se ubican en el exterior.
“El mercado abre desde las seis de la mañana hasta las tres y media de la tarde. Todos estamos cumpliendo con nuestros protocolos. Hay que ingeniársela para protegernos y proteger a nuestros clientes”, indicó un vendedor.
Los comerciantes aclararon que la colocación de vidrio en los puestos lo hicieron con su propio dinero, pues no recibieron el apoyo de la Municipalidad de Chiclayo. Además, ellos mismos compraron alcohol, desinfectantes y pagan a personal de limpieza para el trabajo diario en el recinto.
El mercado Buenos Aires es uno de los once mercados municipales de Chiclayo, y espera recibir la certificación de Mercado Saludable, que fomenta la Gerencia Regional de Salud de Lambayeque, para reconocer a los mercados donde se cumplen estrictos protocolos de bioseguridad.
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