Milvida Yusepi de Gouveia de Sousa dijo que tiene su título de licenciada en enfermería, pero no lo ha podido validar, porque no cuenta con el dinero suficiente. Ella asegura que no tendría temor de trabajar en un hospital con pacientes COVID-19.
Milvida Yusepi de Gouveia de Sousa llegó hace dos años, de su natal Venezuela, a la ciudad de Lambayeque. Es enfermera y sus dos hijos son el motivo que la impulsa a trabajar. Ella espera una oportunidad para poder ejercer su profesión.
Empezó como trabajadora del hogar, pero fue despedida. Ahora se dedica a la venta de helados. Cuando se decretó el estado de emergencia, acató la medida por 25 días, pero la falta de comida la hizo regresar a las calles para ofrecer sus helados.
El ser personal de salud hace que cumpla con los protocolos; usa mascarilla, alcohol y agua con lejía para desinfectar el carrito de helados y el dinero que recibe. Por cada helado que vende gana entre 0.10 y 0.50 céntimos que le sirven para pagar el alquiler del cuarto en el que vive.
“No tener que comer fue fuerte. Gracias a sus compatriotas, me dieron una bolsita de comida. Con 10 soles que tenga de ganancia ya me sirve para el desayuno y almuerzo. Recorro todo Lambayeque, ya sea caminando o pedaleando. Salgo a las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde”, manifestó.
Malvidia de Gouveia anhela ejercer su profesión y tener un puesto de trabajo en cualquier centro de salud, pero su título profesional no está validado por el Estado peruano.
“Soy licenciada en enfermería, traje mis papeles, no puede entrar cuando convocaban, porque me dijeron que tengo que convalidar mi título en Lima que cuesta dos mil soles y eso no tengo. Yo si iría (a un hospital) no me importa, tomando mis medidas de seguridad, porque se cómo cuidarme. Lo único que le pido al presidente Vizcarra no es un bono, no queremos dinero, sino que nos deje trabajar para pagar alquiler y vivir en este país”, dijo.
Tiene sus documentos en regla, cuenta con carnet de extranjería que le permite desplazarse con tranquilidad.
En la ciudad de Lambayeque son más de mil ciudadanos venezolanos que se encuentran en las calles vendiendo fruta, verduras, alcohol y mascarillas. Siete de ellos se encuentran vendiendo helados al igual que Malvidia, todos piden una oportunidad de empleo.
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