Jorge Pérez Flores advirtió que los ríos no están preparados para soportar caudales elevados ante la inminencia de lluvias asociadas con un eventual Fenómeno El Niño. También demandó al Ejecutivo activar el Fondes y acelerar obras de defensas ribereñas para evitar daños millonarios.
“Lima no es el Perú. Existen 24 regiones además de Lima.”
Jorge Pérez Flores, gobernador regional de Lambayeque
El gobernador regional de Lambayeque, Jorge Pérez Flores, expresó su preocupación por la falta de defensas ribereñas en puntos críticos de diferentes distritos de la región, como: Olmos, Motupe, Íllimo, Pacora, Jayanca y otras zonas que resultan muy vulnerables en época de lluvias.
La autoridad regional explicó que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) ya emitió diferentes alertas por presencia de lluvias, que si bien, en la actualidad son ligeras, podrían intensificarse rápidamente: “Estas lluvias se van a ir acrecentando día a día, y si ya tenemos Fenómeno El Niño vamos a tener precipitaciones por encima de 8 o 10 milímetros”, señaló.
Según dijo, y teniendo antecedentes, los ríos en Lambayeque que hoy transportan entre 10 y 20 metros cúbicos de agua por segundo podrían elevar su caudal hasta los 400 m³, superando con amplitud su capacidad. En tal razón, afirmó que los cauces que han sido intervenidos por la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN) “no están acondicionados” para recibir cargas extraordinarias: “No están entendiendo que estas obras de defensa ribereña le van a ahorrar al país aproximadamente 20 mil millones de soles”, advirtió: Jorge Pérez Flores.
Pedido urgente al Ejecutivo: declarar emergencia y activar el FONDES
Jorge Pérez Flores fue muy enfático al señalar que el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) “está siendo muy laxo” al no declarar en emergencia a Lambayeque y otras regiones del norte, lo que impide activar presupuestos inmediatos.
“Ahorita necesitamos declarar en emergencia porque con eso activamos todos los presupuestos, no solamente del Gobierno Central, sino también del regional y municipal”, sostuvo.
Además, cuestionó que a la ANIN se le haya asignado 300 millones de soles más para reactivas obras a nivel nacional y que Lambayeque requiera de 700 millones: “No lo están entendiendo, no va a alcanzar"
Pérez Flores pidió al presidente, José Jerí, que visite la región junto a los ministros de los sectores involucrados, las autoridades de la Asociación Nacional del Agua (ANA), los del Programa Subsectorial de Irrigaciones (PSI), y puedan ver in situ los problemas que se tendrán los próximos meses en Lambayeque por las lluvias.
También, insistió en que se debe activar el Fondo para Intervenciones ante la Ocurrencia de Desastres Naturales (FONDES): “Plata hay, señores. Lo que pasa es que no están catalogando la magnitud del problema”, afirmó. Comparó este escenario con los retrasos en declarar emergencia por incendios forestales durante el gobierno de Dina Boluarte.
Cultivos en riesgo ante un posible desastre
El gobernador regional de Lambayeque, alertó que más de miles de agricultores podrían resultar afectados, especialmente en zonas como Huaca de la Cruz del distrito de Íllimo donde la infraestructura se encuentra destruida, y de llegar las lluvias fuertes traerían consigo mucho desastre y la recuperación será cinco veces más costosa. Recordó los daños ocasionados por eventos anteriores: más de 20 mil millones de soles en el 2017 y cerca de 2 mil millones de soles durante el Yaku.
Cobertura especial de RPP
El equipo de RPP llegó hasta el sector Tres Puentes A y B, del centro poblado menor de Batangrande, jurisdicción del distrito de Pitipo, provincia de Ferreñafe, a una hora de la ciudad de Chiclayo.
En el lugar, constatamos el grave riesgo al que se exponen diariamente alrededor de 100 escolares de nivel primaria y secundaria, quienes deben cruzar un puente artesanal construido por los propios pobladores. La creciente del río La Leche arrasó parte de la estructura y, para permitir el paso, los vecinos colocaron una escalera de aluminio que los menores deben descender para continuar su camino.
Santos Chupillón, representante del sector Tres Puentes A, indicó que la zona es altamente vulnerable y que, con el aumento del caudal, el puente colapsa cada año, dejando aislados a unos cinco caseríos durante la temporada de lluvias.
Por su parte, Segundo Guevara, del sector Tres Puentes B, lamentó que, pese a la visita de diversas autoridades locales y regionales, hasta ahora no se haya instalado un puente seguro y definitivo que proteja a las familias ante la crecida del río.
Aquí, no solo los escolares son afectados, también los pobladores porque no pueden salir a comprar alimentos, y los agricultores que siembran arroz, papa y yuca en la zona no pueden trasladar sus productos a Batangrande ni a los mercados de Chiclayo.