Madres de familia, precisan que los 220 comedores populares de la provincia de Chiclayo, quedarían desabastecidos.
Un grupo de madres de familia de los diferentes programas sociales protestó en los exteriores de la sede de la Contraloría de República, rechazando el congelamiento de las cuentas bancarias del municipio de Chiclayo que hizo efectivo el Ministerio de Economía en los últimos días a pedido de la contraloría.
"Al congelarse las cuentas del municipio, los comedores quedarían desbastecidos debido a que no se les pagaría a los proveedores y ellos nos dejarían sin alimentos", precisó a RPP Noticias una representante de los programas sociales.
Manifestó que aproximadamente más de 11 mil personas de 220 comedores populares de la provincia de Chiclayo, quedarían desabastecidos de alimentos.
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