El documento de 31 páginas, presentado ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, indica que existen indicios que Urtecho incurrió en concusión, estafa y enriquecimiento ilícito.
Los exintegrantes de la comisión de Ética del Congreso, presentaron una denuncia constitucional contra el congresista Michael Urtecho, ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Parlamento, por haber hallado indicios de corrupción en el comportamiento del legislador de Solidaridad Nacional.
El documento de 31 páginas, firmado por Humberto Lay y los congresistas que integraron el citado grupo de trabajo que culminó sus funciones el pasado 10 de octubre, indica que Urtecho habría incurrido en concusión, estafa y enriquecimiento ilícito.
"Interponemos denuncia Constitucional contra el congresista Wilson Michael Urtecho Medina (...) por presuntamente haber incurrido, con ocasión del ejercicio de sus funciones, en los delitos de concusión estafa y enriquecimiento ilícito, todos ellos en agravio del Estado peruano, representando por el Congreso de la República", dice el escrito.
La denuncia constitucional ha sido sustentada con pruebas testimoniales y documentales, así como con fundamentos de derecho.
El documento señala que los firmantes decidieron por unanimidad interponer una denuncia constitucional, pues existían indicios de que Urtecho Medina, "se habría aprovechado de su cargo para cometer actos de corrupción, apropiándose del dinero de sus trabajadores en su perjuicio y en perjuicio del patrimonio del Estado"
"Tales actos de corrupción (...) a juicio de la comisión de Ética, constituyen los delitos de concusión", puntualizan.
Asimismo, indican que el delito de estafa, se constituiría sobre "indicios razonables", en los contratos hechos por el congresista a Elvira Urbina Rodríguez y Rebeca Cóndor Montero, como trabajadoras del Congreso, cuando en realidad realizaban labores domésticas en el domicilio del parlamentario.
También afirman que la acusación de enriquecimiento ilícito se basa en el hecho de que "el congresista y su esposa son propietarios de un edificio cuyo valor superaría excesivamente los ingresos que percibía como funcionario".
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