Humberto Lay renunció a su cargo, luego de que el grupo de trabajo desestimó suspender a la legisladora, Cenaida Uribe, señalando que en esta decisión primaban decisiones políticas.
Un desenlace sorpresivo tuvo la sesión de la Comisión de Ética del Congreso de la República este lunes cuando su presidente Humberto Lay renunció a su cargo, luego de que el grupo de trabajo desestimó suspender a la legisladora Cenaida Uribe por supuestamente ejercer presiones a favor de la empresa Punto Visual.
Tras su renuncia, el legislador refirió que el informe revelaba con mucha claridad que la congresista había cometido una falta, agregando que había pruebas indiciarias que estaban basadas en hechos comprobados.
"Me da pena por el Congreso porque se sigue desfigurando y afectando su imagen. Otra vez comienza a tomar valor la frase "otorongo no come otorongo", cuando la comisión ha trabajado en estos dos años y medio y ha mostrado objetividad", expresó en un programa de televisión.
Uribe se libró del pedido de una sanción congresal con los votos del partido de gobierno, Perú Posible y del aprista Mauricio Mulder, este último consideró que Lay hizo una pataleta con su actitud.
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