Titular del Interior afirma que estrategia del narcoterrorismo consiste en que la población se oponga a erradicación de cocales.
La actual estrategia del narcoterrorismo consiste en soliviantar a la población contra los esfuerzos del Estado en lograr la erradicación de los cultivos de hoja de coca y la venta ilegal de insumos químicos utilizados en la elaboración de cocaína, dijo el ministro del Interior, Octavio Salazar.
Mencionó, por ejemplo, que el narcoterrorismo azuza a la población de la localidad de Aucayacu, para que rechace el trabajo desarrollado por personal del Proyecto Especial de Control y Reducción de los Cultivos de Coca en el Alto Huallaga (Corah).
Similar actitud promueven en otras zonas, como el VRAE, en oposición a los esfuerzos del Estado para acabar con esa ilícita actividad.
"Eso motiva a que hieran al personal y que la Policía tenga que hacer el uso de las armas que el Estado les ha entregado para defender la vida de todo el personal del Corah y de la Dirandro que se encuentra en ese lugar. Ellos siempre utilizan ese tipo de estrategia", refirió en declaraciones a la agencia Andina.
Para contrarrestarla, señaló que el Gobierno despliega esfuerzos para "ganarse a la población" a través de los programas sociales que favorezcan los niveles de cobertura de servicios como agua potable, alcantarillado, energía eléctrica, etc.
Adelantó, en ese sentido, que esta semana el presidente del Consejo de Ministros, Javier Velásquez, viajará con algunos miembros del Gabinete al valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) para poner en marcha programas de ayuda social y reforzar la presencia estatal.
Agregó que en esta visita de trabajo anunciarán una serie de acciones a desarrollarse en ese sector del país, a ser financiadas con los 50 millones de soles destinados para ese fin, con lo que se busca aumentar la presencia del Estado en la zona afectada por el narcoterrorismo.
"De esa manera reforzamos el accionar de la autoridad democrática y contrarrestaremos la campaña narcoterrorista que pretenden ganar espacio en lugares donde la presencia del Estado es escasa", subrayó.
Salazar también consideró importante que la estrategia antinarcótica puede reforzarse con el establecimiento de las garitas de control itinerante para interceptar el tráfico de insumos químicos.
"Tenemos en estos momentos cuatro garitas, no las tenemos móviles todavía, pero las vamos a convertir pronto. Estamos en el proceso para poder lograrlo", acotó.
-ANDINA
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