El congresista de la Bancada Liberal señaló que la propuesta del presidente Martín Vizcarra recoge el descontento de la población y cuestionó que desde el Parlamento se busque "entrampar" la posibilidad de que la población se manifieste en un referéndum.
El congresista Alberto de Belaunde (Bancada Liberal) ironizó con las críticas de un sector del Parlamento que acusa al presidente Martín Vizcarra de "dictador" por su reciente propuesta de adelanto de elecciones -y como consecuencia, de recorte de mandato congresal y presidencial-, hecha durante su Mensaje a la Nación por Fiestas Patrias.
"Durante meses se ha querido crear, desde algunos sectores, la narrativa de que estamos frente a una suerte de dictador. Es la primera vez que veo a un dictador limitando su periodo de esta manera y con esta narrativa pública. Creo que el Congreso tiene que tomar el debate con calma, teniendo en cuenta lo que la población nos está pidiendo", señaló.
De Belaunde respaldó la medida anunciada por el jefe de Estado al mencionar que se trata de una "salida constitucional". En ese sentido, mencionó que el antecedente del año 2000, en medio de la crisis política por la segunda reelección del entonces presidente Alberto Fujimori, demuestra "que el camino existe".
El exoficialista consideró que, en medio del actual escenario de "crisis y permanente confrontación", la propuesta del Ejecutivo canaliza "la frustración y el descontento por un camino civilizado". Asimismo, recordó que, luego de ser aprobado en el Parlamento, la propuesta tendrá que obtener legitimidad de la población vía referéndum.
"Creo que es el mecanismo más adecuado para poner fin a esta crisis que empezó con distintas manifestaciones hace tres años. Sin duda toda elección trae un periodo de incertidumbre -que se llevaría un año después si es que no hubiera habido esta propuesta- pero ayuda a que esta permanente confrontación y crispación pueda encontrar cauces democráticos", dijo.
De Belaunde destacó la importancia de que el Parlamento tenga "voluntad política" para debatir y aprobar esta iniciativa, la cual, en su opinión, tiene el mérito de "institucionalizar" el descontento ciudadano y encontrar una fórmula dentro de la constitución a fin de evitar que en el futuro se alimenten "posiciones extremas".
"Son tres años donde la bancada mayoritaria ha tenido una permanente actitud de enfrentamiento y creo que, más allá de la reforma política, es lo que explica el ambiente que ha llevado a esta crisis institucional y creo que debemos tener un diálogo de cara a la gente, en el sentido de que un Congreso no puede entrampar una propuesta que finalmente llegará al ciudadano", sentenció.
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