Con el retorno de la bicameralidad, el Senado será responsable de designar a altas autoridades y aprobar acuerdos que influirán en el control político y económico del país. ¿Cómo cambiará esto la dinámica del poder? Los detalles en el siguiente informe.
Después de más de tres décadas, el Senado vuelve a la escena política del Perú. A partir de las próximas elecciones generales, 60 senadores ocuparán la cámara alta, un espacio que intervendrá en decisiones con impacto en el rumbo económico y el control del poder político del país.
Conforme a lo establecido en la Constitución Política, el Senado revisará y aprobará los proyectos de ley que lleguen desde la Cámara de Diputados, actuando como un segundo filtro antes de su promulgación.
También ratificará tratados en materia de derechos humanos, soberanía, defensa nacional y obligaciones financieras del Estado. Desempeñar estas funciones requiere senadores capaces de evaluar a fondo el impacto de cada decisión, señala el analista político Enzo Elguera.
"Lo que aporta el perfil del senador es la especialización técnica, pues su trayectoria público-técnica pueden detectar impactos fiscales, regulatorios o administrativos que pasen desapercibidos en lecturas apresuradas. Si el Senado incorpora voces de raíces regionales, las políticas nacionales tendrán a considerar diferencias económicas, sociales y culturales fuera de Lima, un objetivo que, en otros países, se intenta garantizar con representación territorial en la cámara alta", indicó.
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Requisitos y demás prerrogativas de la cámara alta
Para postular al Senado, la ley exige tener al menos 45 años o haber sido antes congresistas o diputado. Esta cámara se mantendrá en funciones incluso si el Presidente de la República decide cerrar el Parlamento.
Quienes ocupen este cargo revisarán casos de autoridades, acusadas por la Cámara de Diputados, de infringir la Constitución o cometer delitos en funciones. Por su papel central en la fiscalización del poder político, los requisitos para postular deberían ser más estrictos, señala Óscar Matutti, experto en temas electorales.
"El Senado tiene que servir de contrapeso a otras instituciones del Estado. [...] Se debería haber puesto mayores requisitos para ser senador en nuestro país, por ejemplo, haber ocupado el cargo de alcalde o de gobernador regional, y evidentemente eso no está pasando. No se le ha puesto un mayor peso institucional, ni mayores filtros al cargo de senador, que era importante para darle mayor peso democrático a la institución", indicó a RPP.
Matutti indicó que, al establecerse en la norma que el presidente solo puede disolver la Cámara de Diputados, se le otorga al Senado una función de “anclaje institucional” que le brindará mayor estabilidad al Estado.
¿Qué autoridades designará el Senado?
La Cámara Alta, además de autorizar los viajes del Presidente de la República al extranjero, designar a funcionarios de alto nivel como el defensor del Pueblo, el contralor de la República, magistrados del Tribunal Constitucional y otras figuras relevantes para el sector económico. Así lo explica Paola del Carpio, economista y coordinadora de Investigación de Redes de Estudio para el Desarrollo.
"Los senadores son los encargados de elegir a tres directores del Banco Central de Reserva y ratificar la designación del presidente, lo cual es clave, por supuesto, para nuestra estabilidad de la moneda. También es el caso del superintendente de Banca Seguros y AFP, que tiene un rol fundamental para supervisar y proteger los ahorros y las pensiones de los ciudadanos", explicó.
Del Carpio indicó que la Cámara Alta también ejerce control sobre los decretos legislativos, decretos de urgencia y otras normas del Poder Ejecutivo, no para limitar su uso, sino para garantizar que se apliquen de manera eficiente.
"Si se aplica bien, dentro de todo lo positivo, puede aportar mayor legitimidad. Y lo mismo con los tratados internacionales, varios de los tratados de libre comercio que tenemos ahora han tenido que ser aprobados también por nuestro Congreso. Que pasen por el Senado ahora le añade una capa de escrutinio", indicó.
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¿Cómo se discutirá el presupuesto público en el siguiente Congreso bicameral?
Según la Constitución, el presidente de la República envía al Congreso el proyecto de Ley de Presupuesto dentro de un plazo que vence el 30 de agosto de cada año. Dicho proyecto es estudiado y dictaminado por una comisión bicameral integrada por igual número de senadores y diputados.
En este espacio, los miembros de la Cámara Alta pueden contribuir a definir mejor las prioridades del gasto público, señala el exministro de Economía, David Tuesta.
"El presupuesto no es solo una planilla de ingresos y gastos, sino que es el principal instrumento de política pública. Entonces, para el tema de presupuesto público, es muy importante, que si una Cámara Alta con figuras de amplia experiencia puede revisar y ordenar las prioridades, podría reducir el riesgo de gasto clientelista también llamado gasto de corto plazo", explica.
"Ahora bien, hay que tener en cuenta que la ley que crea el Senado en el Perú tiene algunas limitaciones, como que los plazos de revisión del presupuesto público pueden acortarse en caso de urgencia. En la práctica, esto puede ser útil, pero, por otro lado, deja al Ejecutivo con margen para aprobar partidas que no tengan el debido filtro. Esta es una debilidad normativa que puede reducir la fuerza del control", añade.
Tuesta recalca que, si bien retomar la figura del Senado genera expectativas para mejorar el trabajo legislativo, el problema es que "no está claro si el Senado tendrá las capacidades técnicas o cuerpos especializados para resistir las presiones de grupos de interés".
"Ahí la clave es dotar tanto a la Cámara Baja como al Senado de estas capacidades institucionales, para evitar las leyes mal hechas que tanto nos están costando", resalta.
La bicameralidad puede frenar decisiones apresuradas en el Congreso, pero no asegura, por sí sola, senadores de mayor calidad. Por eso, la responsabilidad también está en los ciudadanos a la hora de votar de manera responsable e informada en las elecciones de abril de 2026.