Silvana Vargas es investigadora certificada por el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica y experta en ciencias sociales. Revisamos la experiencia académica y laboral de la nueva ministra de inclusión social.
Silvana Vargas Winstanley se convirtió en la nueva ministra de Desarrollo e Inclusión Social, es Ph.D. en Sociología Rural y demografía por la Pennsylvania State University en los Estados Unidos. También investigadora y se ha desempeñado como consultora externa en monitoreo y evaluación para el área de Desarrollo Humano del Banco Mundial.
En la Pontificia Universidad Católica del Perú, ha sido directora de la maestría en sociología y directora académica de responsabilidad social, en el Instituto de Desarrollo Humano de América Latina fue directora ejecutiva.
Tiene experiencia en el sector público como directora general de políticas y estrategias del despacho viceministerial de políticas y evaluación social del ministerio de Desarrollo e Inclusión Social.
En el año 2015 publicó un libro junto a la exministra de Desarrollo e Inclusión Social, Carolina Trivelli, donde plasman sus experiencias en el Minsiterio: "Entre el discurso y la acción". En la publicación se explican las razones del porqué la política de inclusión social busca igualar el punto de partida desde el cual todos los peruanos se involucren de las políticas sociales. Ambas expertas en temas sociales ofrecen su punto de vista sobre los retos y dificultades para poner en práctica la teoría enfocada al desarrollo de las personas.
En una entrevista al Instituto de Democracia y Derechos Humanos, Silvana Vargas fue consultada por cómo involucrar a los jóvenes en el desarrollo de proyectos sociales, a lo que respondió que se "debe reforzar una formación crítica basada en valores entrenándolos en el diseño y en la aplicación de herramientas metodológicas que les permitan trabajar con poblaciones diversas y la capacidad de adaptarse", dijo.
Los sectores más pobres fueron los que más se vieron afectados por la pandemia, hubo un gran descontento por el desorden que generó en la entrega de los bonos que estuvo a cargo del ministerio de inclusión social. Respecto a ello la nuevo ministra anticipó en una de sus columnas en el diario La República que se necesitan "cambios importantes en cuatro frentes: una inminente revolución tecnológica que abarcará megaprocesos como la transformación digital y uso de TIC a gran escala, un cambio radical en las dinámicas de formación profesional y estructura del mercado laboral, la reconfiguración de los vínculos sociales en lo cotidiano (que implicará, a la par de la revolución tecnológica, una a nivel de los valores); y cambios en el ejercicio del poder, con “gobierno digital”.
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