El expresidente dijo que solo habló unos minutos con el empresario dominicano Fortunato Canaán, procesado por presunto soborno por el caso Hospitales.
El expresidente Alan García declaró como testigo convocado por la defensa del exministro Rómulo León Alegría, procesado por el presunto delito de cohecho activo en agravio del Estado por el caso Hospitales.
“Vengo en condición de testigo. No soy imputado ni investigado. Vengo a un caso extraño. Alguna vez se apareció un inversionista dominicano y dijo que construía hospitales. Fue referido al ministro de Salud. Nunca más apareció. No se hizo hospital con él. Ni jamás presentó documentos en una licitación. No sé qué se investiga aquí”, dijo a su ingreso al Tercer Juzgado Penal Unipersonal del Sistema Especializado en Delitos de Corrupción de la Corte Suprema de Lima.
El fiscal José Domingo Pérez acusó al empresario dominicano Fortunato Canaán Fernández de beneficiarse irregularmente con la licitación de proyectos de hospitales durante el segundo gobierno de Alan García, y sindica a Rómulo León como su nexo con las esferas del régimen aprista.
Sobre Canaán, García dijo que solo lo vio “15 minutos” y lo envió a conversar con el ministro de Salud de entonces Carlos Vallejos Sologuren.
Niega relación con Odebrecht
El expresidente volvió a deslindar posibles vínculos con la constructora brasileña Odebrecht y dijo que no está involucrado en ningún negociado, coima o soborno. “Eso desespera a mis adversarios que andan diciendo ‘está dentro PPK, ya tenemos a Toledo perseguido, Humala adentro y ¿por qué Alan no?’”
“Alan no porque no tengo por costumbre utilizar el Gobierno para enriquecerme, entiéndalo bien no pierdan su tiempo. Barata y Odebrecht han sido clarísimos nunca hablaron dada ilícito conmigo. Nunca les pedí ni recibí nada de esos señores”, dijo.
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