El periodista de IDL Reporteros comentó en RPP Noticias que la información que se tiene aún ve sus primeras luces en el caso Lava Jato.
El periodista de investigación Gustavo Gorriti ha investigado, desde sus orígenes, el escándalo de corrupción del caso Lava Jato y sus implicancias en el Perú. Esta enredadera que involucra a diferentes funcionarios de más de 12 países apenas ve sus primeros acercamientos a lo que puede ser uno de los casos más escandalosos de la historia.
En entrevista con RPP Noticias, el director de IDL Reporteros dio más aproximaciones respecto de este caso y lo que podría venir en los procesos en nuestro país.
"Habrá una colección de presidentes y expresidentes que estarán involucrados. Es una vergüenza para ellos (los involucrados), no para nosotros", comentó en el programa Tiempo Real.
Cuantiosa información. Contó también que la información que manejan las autoridades de Brasil respecto del caso Lava Jato supera los 5 terabytes y medio, a diferencia de los datos consignados en la investigación de la empresa Mossack Fonseca, conocido como los Panamá Papers.
En el Perú, los primeros en caer han sido los miembros a cargo de la licitación de la obra del Metro de Lima durante el gobierno aprista y el expresidente Alejandro Toledo, por haber recibido presuntos sobornos de la empresa Odebrecht.
"Ya había corrido la primera ronda de delaciones premiadas (delatar a quienes recibieron sobornos), mientras se hacía la homologación, los brasileños dieron alguna información básica o permitieron que Jorge Barata hiciera un adelanto de su delación premiada, ahí entregaron lo que concierne a Toledo y al Metro de Lima", explica el periodista.
Más rastros. La información que dio Jorge Barata, expresidente de Odebrecht en Perú, sobre estos funcionarios es apenas un adelanto de toda la información que maneja y que deberá consignar para acceder a los beneficios y reducción de penas. Sobre Toledo, Gorriti comentó que sus movimientos casi que lo delataron.
"Había mucho rastro ya (de irregularidades en las cuentas del expresidente). Antes de la delación de Barata, había elementos para incriminar a Toledo en corrupción. Toledo puede haberse sentido muy vivo pero en realidad ha sido de una gran torpeza. Esa especie de festival de mentiras, también complicó su caso y ha hecho muy fácil eso (la investigación)".
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