Microsoft pone fin a la presencia de Cortana, su asistente virtual para Windows que apareció como respuesta a Google Assistant y Siri de Apple.
En un mundo invadido por la IA generativa, los asistentes virtuales tradicionales no tienen cabida. Microsoft sigue empeñada en consolidar a Copilot AI como su nueva solución inteligente para la optimización de sistemas de todo tipo basados en Windows, Azure y otros recursos de la compañía, pero este camino implica pasar por encima de una entidad que, con los años, perdió notoriedad en todos los entornos digitales: el asistente Cortana. Hoy, Microsoft decidió ponerle fin a una historia carente de éxitos.
Impulsada como respuesta a Siri de Apple y Google Assistant, Cortana aparece en Windows Phone, el sistema operativo que Microsoft desarrolló tras adquirir la división móvil de Nokia y lanzar los hermosos “Lumia”. En 2014, la empresa de Redmond anuncia que la versión 8.1 de este OS vendría optimizado con un asistente que heredó el nombre de la espada mágica de Halo. Tras ese anuncio, el asistente llegó a Android, Xbox One y Windows 10.
El objetivo de Microsoft es claro. Con esta limpieza, buscan ordenar su propuesta IA como marca, una estrategia basada en su partnership con OpenAI para la inclusión de ChatGPT en el navegador Bing. Además, parte de los nuevos modelos de negocio en Microsoft están soportados sobre cómo se pueden incluir procesos de inteligencia artificial en otros productos de la compañía.
Recientemente, Microsoft anunció en el evento BUILD la inclusión de un sistema IA de asistencia llamado Copilot, que se integrará a Microsoft 365 y al entorno de Windows para sugerencias y optimización de acciones habituales en entornos colaborativos y entretenimiento.
De acuerdo con Microsoft, la salida de Cortana será gradual desde 2024, momento en el que será eliminada de Teams en todos sus recursos -Mobile, Display y Room -, y sólo se mantendrá activa en la versión móvil de Outlook hasta que la marca decida darle fin.
Es importante recalcar que Cortana era un producto que buscaba competir en un mercado completamente distinto al actual, en el que los modelos amplios de lenguaje se han posicionado como referentes en temas de IA. Hace 10 años, Google apostaba por la herramienta Now, un desarrollo incluido en Android 4.1 que luego dio el salto a Assitant en todos los productos de la marca, incluyendo sistemas de audio y TV.
Por su parte, Apple presentó en sociedad a Siri, el asistente que marcó el rumbo de los asistentes móviles, junto con el lanzamiento del iPhone 4S en 2011. A diferencia de Cortana, Siri se convirtió en un producto popular entre los usuarios de la manzana, y hoy busca ser potenciado con otras habilidades orientadas a sostener el ecosistema de productos bajo los diversos sistemas operativos de la compañía de Cupertino.
Pese a que Cortana estaba respaldada por una compañía importante, nunca se convirtió en un referente en estos temas. Además de los productos de Apple y Google, la tercera en discordia es Amazon Alexa y su omnipresencia en dispositivos de audio, autos, video, domótica y su conexión directa con el comercio electrónico más importante del mundo.
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