Esta tecnología permite que el usuario fabrique su propio producto desde su casa con el material que desee.
Las impresoras 3D existen desde hace varias décadas, sin embargo, la accesibilidad a la tecnología ha logrado que cada vez más se masifiquen entre los usuarios, una situación que impulsará el comercio creativo, según el director ejecutivo de Shapeways, Peter Wijmarhausen.
"Los productos mejorarán, se harán más rápidos porque no requerirán de un almacenamiento que deberá vender", dijo.
Como se recuerda, las impresoras 3D permiten que el usuario pueda fabricar su propio producto desde su casa con el material que desee.
No obstante, estos artículos tienen la desventaja de que su costo es más elevado que el normal, aunque se espera que los costes bajen en el futuro. Weijmarshausen puso como ejemplo un jarrón impreso en 3D de US$5".
"Es un montón de dinero por un jarrón. Pero al mismo tiempo, es el único jarrón en el mundo que luce de esa forma... Mientras esta tecnología se vuelva más y más popular, creo que el precio bajará", agregó.
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