La agencia espacial rusa, Roscosmos, quiere probar el funcionamiento del cohete portador Soyuz-U, similar al que falló esta semana.
Rusia baraja aplazar el lanzamiento de la próxima nave espacial Soyuz con tres tripulantes a bordo tras la catástrofe con el carguero Progress que se estrelló el miércoles en Siberia.
"Se está hablando de adelantar el lanzamiento de la Progress M-13M del 28 al 14 de octubre y de aplazar el de la Soyuz TMA-22 del 22 de septiembre a noviembre", señaló la fuente a las agencias rusas.
De esta forma, añadió, "el carguero sería enviado a la Estación Espacial Internacional (EEI) antes que la nave tripulada" para no correr riesgos con cosmonautas a bordo.
(Carguero espacial ruso se estrelló en Siberia)
La agencia espacial rusa, Roscosmos, se propone testar el funcionamiento del cohete portador Soyuz-U similar al que falló esta semana durante la puesta en órbita de la Progress M-12M, que llevaba casi tres toneladas de carga vital para la EEI.
Los cohetes portadores de los cargueros Progress y de las naves Soyuz están equipados ambos con motores PD-0110 en su tercera etapa.
Por todo ello, los actuales seis tripulantes de la plataforma orbital tendrán que permanecer en sus puestos más tiempo del previsto.
EFE
Comparte esta noticia