El gobierno de Estados Unidos espera que hasta el 10% de los empleados federales acepten la oferta, lo que podría generar un ahorro de U$D 100 000 millones.
La administración de Donald Trump ha lanzado una controvertida propuesta dirigida a los empleados federales: renunciar voluntariamente a cambio de licencia pagada hasta septiembre. Esta medida, anunciada a través de un correo masivo enviado por la Oficina de Gestión de Personal, busca reducir la plantilla gubernamental y recortar costos en un esfuerzo sin precedentes.
El gobierno espera que entre el 5% y el 10% de los dos millones de empleados federales acepten la oferta antes del 6 de febrero. A cambio, recibirían un paquete de indemnización equivalente a aproximadamente ocho meses de salario y beneficios, lo que supondría un ahorro de U$D 100 000 millones.
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El plan para reducir la burocracia
El correo electrónico instruye a los trabajadores a responder si desean acogerse a esta "dimisión diferida". Esta propuesta se aplica a todos los empleados de tiempo completo, con excepción de quienes trabajan en las fuerzas militares, el Servicio Postal y las agencias de seguridad nacional o inmigración. Los detalles completos de la oferta serán proporcionados a los trabajadores en las próximas horas.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, defendió la iniciativa argumentando que los contribuyentes merecen empleados comprometidos con el servicio público. "Si no quieren trabajar en la oficina y contribuir a que Estados Unidos vuelva a ser grande, entonces son libres de elegir otra línea de trabajo", señaló en un comunicado, asegurando que la administración proporciona una compensación generosa a quienes decidan marcharse.
Reacciones y críticas hacia la propuesta
El mayor sindicato de empleados federales, la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales (AFGE), advirtió que esta medida generará caos en la administración pública. Su presidente, Everett Kelley, señaló que la reducción de personal podría afectar gravemente los servicios esenciales de los que dependen millones de ciudadanos.
"La cantidad de funcionarios públicos no ha cambiado significativamente desde 1970, pero la población que requiere servicios sí ha crecido. Esta purga de empleados de carrera tendrá consecuencias enormes e imprevistas", expresó Kelley en un comunicado.
Órdenes ejecutivas de Trump
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump ha firmado órdenes ejecutivas que exigen el retorno de los empleados federales a la presencialidad al menos cuatro días a la semana. También ha congelado la contratación de nuevos trabajadores federales y ha revocado iniciativas de diversidad, equidad e inclusión implementadas por el expresidente Joe Biden.
La oferta de licencia pagada se enmarca dentro de una estrategia más amplia de reducción de costos y reestructuración gubernamental, que ha generado tanto apoyo como rechazo entre distintos sectores de la sociedad.
Créditos vídeo: YouTube | @NegociosTV.
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