La carpa estaba instalada a menos de un kilómetro del puente internacional Paso del Norte, en la frontera entre México y Estados Unidos.
El gobierno de México cerró un albergue para inmigrantes en Ciudad Juárez, epicentro del fenómeno en la frontera con Estados Unidos, pese a que se acerca una caravana de miles de inmigrantes y esta era la única instalación federal para recibir a personas indocumentadas.
Activistas señalaron a EFE que es un error cerrar este refugio, que sostenía el gobierno en la frontera con la ciudad estadounidense de El Paso, Texas, porque se avecina un numeroso grupo de inmigrantes que saturaría los albergues civiles.
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No se han informado motivos del cierre del albergue
Funcionarios de Juárez desmontaron esta semana la carpa, instalada a menos de un kilómetro del puente internacional Paso del Norte, que ofrecía un lugar para dormir, comer y bañarse, después de que la embajada de Estados Unidos reportó una caída del 50% en los encuentros con inmigrantes irregulares en las seis semanas anteriores.
Pero Rosa Mani Arias, coordinadora de Servicio al Migrante en Avara Juárez, indicó que el fenómeno migratorio es tan imprevisible, que sería mejor mantener esta infraestructura disponible.
“Nuestra frontera representa muchos retos todo el tiempo. A veces cuando nosotros creemos que está tranquilo en cuanto a los flujos, de la noche a la mañana suele cambiar. Entonces creo que no es muy natural tomar decisiones en las que no sabemos en un mes qué va a ocurrir", dijo la activista.
Por su parte, el padre Juan Carlos López Moreno, vocero de la Diócesis de Ciudad Juárez, que gestiona la Casa del Migrante, indicó que el fenómeno va a continuar, por lo que cuestionó el cierre del albergue del gobierno.
“El problema de la migración no ha terminado. Está una caravana que ya ha comenzado su camino. Lo que sí tenemos que reconocer es que la presencia de los inmigrantes en Juárez ha disminuido un poco, probablemente esa sea la razón por la cual las autoridades han decidido desinstalar este campamento”, indicó.
Dijo que los números bajos que hay actualmente en Juárez no deben llevar a suponer que el fenómeno de la inmigración está terminando.
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