El nombramiento del Papa León XIV, el primer pontífice estadounidense, ha generado diversas reacciones en Washington. Desde Marco Rubio hasta George W. Bush expresaron su opinión tras el anuncio.
La elección de Robert Prevost como León XIV, el primer papa estadounidense, ha desatado una ola de reacciones políticas en Estados Unidos. Según informó Telemundo, figuras clave de la política norteamericana han comentado el hecho histórico desde Washington.
Así reaccionaron los políticos de EE.UU. a la elección de Robert Prevost
Marco Rubio, actual secretario de Estado y uno de los católicos más visibles del gobierno, declaró que este es un “momento de profundo significado” y que espera una relación más estrecha entre EE.UU. y la Santa Sede. Rubio, quien regresó al catolicismo tras pasar por el mormonismo y una iglesia bautista, subrayó la importancia del nuevo papado como deber “sagrado y solemne”.
Por su parte, el vicepresidente J.D. Vance ha sido más reservado. Su única reacción ha sido compartir el mensaje oficial de la Casa Blanca en su cuenta de Twitter. La tensión entre Vance y el ahora Papa León XIV tiene antecedentes: cuando era cardenal, Prevost compartió un artículo que criticaba el llamado Ordo Amoris, idea que justificaba priorizar a ciertos grupos, como los ciudadanos por encima de los inmigrantes.
También se pronunció el expresidente George W. Bush, quien junto a su esposa Laura señaló que se trata de un “momento histórico y esperanzador”, y ofreció sus oraciones por el nuevo Papa.
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