A diferencia de los otros grupos etarios para solicitar la naturalización, los mayores de 50 pueden obtener algunos beneficios durante el proceso.
La obtención de la ciudadanía estadounidense se ha convertido en un objetivo primordial para muchos extranjeros que residen en el país. Sin embargo, este proceso implica una serie de pruebas y requisitos, siendo el examen de naturalización uno de los hitos más importantes. Para los solicitantes mayores de 50 años, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (Uscis, por sus siglas en inglés) ha implementado recientemente un ligero cambio en el procedimiento.
El proceso de naturalización para individuos mayores de 50 años ha experimentado un notable aumento en la demanda en los últimos años, según reportes del Uscis. En respuesta a esta tendencia, la agencia de inmigración estadounidense ha establecido una exención del requisito de dominio del idioma inglés para este grupo demográfico.
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Esta exención se aplica a dos categorías principales
- Excepción 50/20: aplicable a individuos de 50 años o más que hayan residido legalmente en Estados Unidos durante al menos 20 años.
- Excepción 55/15: válida para aquellos que tienen 55 años o más y han vivido en Estados Unidos de manera legal durante al menos 15 años.
A pesar de esta exención, el Uscis ha confirmado que los solicitantes adultos mayores de 50 años aún deben rendir el examen de educación cívica. Sin embargo, se les otorga la opción de realizar este examen en su idioma nativo si llevan consigo un intérprete que sea competente tanto en inglés como en el idioma del solicitante durante la entrevista.
Además, se ha anunciado un trato especial para los solicitantes mayores de 65 años que hayan sido residentes permanentes durante al menos 20 años al momento de solicitar la ciudadanía. Durante la prueba de educación cívica, estos individuos recibirán consideraciones especiales que facilitarán su proceso de naturalización.
Estos cambios en el proceso de naturalización reflejan los esfuerzos del Uscis por adaptarse a las necesidades y circunstancias específicas de diferentes grupos demográficos dentro de la población inmigrante en Estados Unidos. Con estas medidas, se busca garantizar un proceso más accesible y equitativo para aquellos que aspiran a convertirse en ciudadanos estadounidenses.
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