La decisión del gobierno de Texas se produce en un contexto de cambios en las políticas migratorias de Estados Unidos.
La reciente suspensión del programa de transporte de inmigrantes en autobuses desde Texas a ciudades demócratas ha generado preguntas sobre sus causas. La disminución en el número de inmigrantes en la frontera parece ser la razón principal detrás de esta pausa.
El factor clave
Desde que el gobernador de Texas, Greg Abbott, implementó el programa de transporte de migrantes en 2022, más de 120 000 personas fueron enviadas a ciudades como Nueva York, Chicago, y Washington D.C.
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Sin embargo, en junio de 2023, la administración Biden emitió una orden que limitó drásticamente el número de inmigrantes liberados en el país tras cruzar la frontera de manera ilegal. Esta nueva política redujo significativamente las llegadas a la frontera, lo que llevó a una caída en la demanda de autobuses.
A medida que los cruces ilegales disminuyeron, también lo hizo la necesidad de transportar inmigrantes a otros estados. En el área de Eagle Pass, por ejemplo, los encuentros con migrantes cayeron de 71,000 en diciembre de 2022 a solo 7,200 en julio de 2023. Este descenso ha dejado a Texas sin suficientes migrantes interesados en abordar los autobuses hacia las ciudades santuario.
La pausa en el envío de autobuses no solo refleja un cambio en la dinámica migratoria, sino también en la política estadounidense. El transporte de migrantes desde Texas había sido un instrumento político para presionar a los líderes demócratas a abordar la situación en la frontera.
Sin embargo, la disminución de los cruces ha debilitado este argumento, haciendo que la inmigración y la seguridad fronteriza pierdan fuerza como temas centrales en la campaña electoral.
Aunque el programa no ha sido cancelado oficialmente, la falta de migrantes ha hecho que los autobuses permanezcan inactivos. Las autoridades de Texas han confirmado que los autobuses seguirán estacionados cerca de la frontera, listos para ser utilizados en caso de que aumente la demanda. No obstante, el futuro del programa dependerá de cómo evolucione la situación en la frontera y de las decisiones políticas que se tomen en los próximos meses.
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